El presidente de APAZ, en El Periódico de Aragón
El endurecimiento de las pruebas destinadas a la obtención del carné de conducir, que la Dirección General de Tráfico (DGT) impondrá desde enero del 2013, cuentan con el respaldo de las autoescuelas zaragozanas, que consideran que la medida persigue, sobre todo, profundizar en la «formación del conductor», según Carlos Bricio, presidente de la Asociación Provincial de Autoescuelas de Zaragoza (APAZ).
Las modificaciones endurecerán el examen y, así, los exámenes teórico y práctico constituirán un paso previo mucho más complicado para obtener el permiso de conducción. Desde la DGT se considera que este nuevo sistema redundará en una «mayor seguridad vial».
Así, de las 800 preguntas que existen en la actualidad, y que muchos alumnos decidían «memorizar en su totalidad sin apelar a la comprensión didáctica», la DGT pasará a disponer de 15.500 que se presentarán de manera aleatoria por internet a los 60 puntos de examen que existen en España.
También la prueba práctica resultará mucho más complicada. La DGT ha decidido instaurar el Examen Práctico de Calidad, en el que se combina el test tradicional con el examinador dando instrucciones al aspirante, con un periodo de tiempo en el que los alumnos tendrán que dirigirse a un lugar que conozcan sin ningún tipo de guías. Este tipo de examen divide la prueba en tres partes: los diez primeros minutos, de conducción autónoma, sin instrucciones por parte del instructor, 15 minutos más de conducción guiada y una tercera parte que el ingeniero dedicará a explicar al alumno, si procede, por qué ha suspendido.
«Aplaudimos las modificaciones porque la formación había caído en picado, no había calidad en la enseñanza y los exámenes habían sido relegados casi a puro trámite», apuntó Bricio, que considera la iniciativa «una manera de que el conductor comprenda las normas».